El CBD y el THC no son lo mismo y conocer sus diferencias te van a permitir tomar decisiones informadas sobre su uso.
Aunque se trata de dos cannabinoides que provienen de la planta del cannabis, difieren drásticamente en sus efectos (especialmente en la psicoactividad), potencial terapéutico y estatus legal.
En este artículo vamos a explicarte cuáles son las diferencias del CBD y el THC, comenzando por su definición y cómo se obtienen.
¿Qué son el CBD y el THC?
El CBD o cannabidiol es un cannabinoide del cannabis, no psicoactivo, que interactúa con el sistema nervioso central y modula de forma indirecta los receptores CB1 y CB2 uniéndose otros receptores como 5-HT1A (serotonina). Por ello, se trata de un componente que ayuda a modular la respuesta del organismo ante la inflamación, el dolor y la ansiedad.
Por su parte, el THC o tetrahidrocannabinol también es un cannabinoide, pero sí es psicoactivo. Por esta razón, puede provocar estados de euforia o alterar el estado mental de las personas que lo consumen. Este si que se une de forma directa al CB1 y CB2 y tiene resultados más intensos. Su uso terapéutico requiere supervisión médica.
La elección entre uno u otro va a depender del efecto que se busque como vamos a ver en el apartado de efectos terapéuticos.
¿Cómo se obtienen?
Tanto el CBD como el THC se extraen de las flores y hojas de la planta del cannabis, dónde se concentran los cannabinoides en los tricomas. Uno de los métodos de extracción más comunes es usando dióxido de carbono (CO2) a alta presión y temperatura. Con ello se disuelven los compuestos de la planta y se consigue un extracto puro y seguro.
compuestos de la planta y se consigue un extracto puro y seguro.
Existen otros métodos alternativos como la extracción con etanol u otros disolventes orgánicos, o mediante técnicas mecánicas. También es posible obtener aceite de cannabis mediante el prensado de las semillas de esta planta.
La cantidad de estos cannabinoides que se puede conseguir va a depender de la planta, pero también del método utilizado.
Diferencias principales entre CBD y THC
Además de las diferencias que ya hemos comentado en relación con la definición y origen del CBD y el THC, vamos a profundizar en sus diferencias en cuanto a la estructura química, su psicoactividad, sus efectos terapéuticos y la legalidad aplicable.
Estructura química
La mayoría de los cannabinoides, como ocurre con el THC, tienen una estructura carbocíclica de 21 carbonos, y suelen estar formados por 3 anillos: el ciclohexeno, el tetrahidropirano y el benceno.
Sin embargo, el CBD presenta una estructura ligeramente diferente, ya que el anillo de tetrahidropirano está abierto, lo que modifica su afinidad con los receptores cannabinoides.
Psicoactividad
La psicoactividad es la capacidad de un compuesto de actuar en el sistema nervioso central y producir cambios significativos en el estado mental, la cognición y las emociones.
Aclarado el término, debes saber que el THC es uno de los cannabinoides naturales con mayor potencia psicoactiva que afecta al sistema nervioso central. Por esta razón, debe usarse con precaución y siempre bajo supervisión médica.
En cambio, el CBD carece prácticamente de efectos psicoactivos y, en algunos tratamientos, se combina con THC para equilibrar sus efectos, aumentando los beneficios terapéuticos y reduciendo los secundarios.
El THC es un analgésico potente que se utiliza en cuadros de dolor intenso, para aliviar los síntomas de trastornos neurológicos como la esclerosis múltiple, o para combatir las náuseas de la quimioterapia, entre otras aplicaciones médicas.
El CBD destaca por sus potentes efectos terapéuticos antiinflamatorios y analgésicos que lo convierten en un activo eficaz para combatir el dolor muscular y la artritis.
Por su parte, el aceite de semillas de Cannabis, rico en ácidos grasos esenciales, vitaminas y antioxidantes mejorar la hidratación de la piel, refuerza la barrera cutánea y favorecen la retención de la humedad natural.
Por ello, en Dr. Tree hemos incluido en el gel calmante Flavorelax de Dr. Tree activos específicos para el alivio de dolores musculares y articulares, como el aceite de semillas de Cannabis, que hidrata en profundidad y suaviza la piel, y CBD, que aporta sensación de alivio y bienestar en las zonas de la piel tensas.
Su fórmula, compuesta por un 92,1 % de ingredientes naturales, combina estos activos con árnica, Sambucus nigra, ciprés y sello de salomón, que mejoran la microcirculación, calman la sensación de pesadez, junto con prebióticos, que estimulan las defensas naturales de la piel y refuerzan su microbioma. Juntos, calman la inflamación, relajan la tensión de la zona y aportan alivio y bienestar instantáneos.
Legalidad y cantidades de THC y CBD en productos
En España, el cultivo y uso de los cannabinoides está regulado, estableciendo principalmente límites en cuanto a la concentración de THC permitida.
El cultivo de cáñamo industrial para la obtención de semillas, fibra y otros usos autorizados ha sido aprobado por la Unión Europea, siempre que el contenido en THC no supere el 0,3 % para su comercialización*. En algunos productos derivados, como los aceites de CBD, el límite permitido es de 0,2 %, con la intención de garantizar su seguridad.
Por otro lado, el cannabidiol no está prohibido, pero su venta para consumo humano se encuentra sujeta a una regulación estricta, en muchos casos supervisada por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). Actualmente, en España solo se permite su uso en productos cosméticos o de aplicación tópica.
* La regulación sobre el CBD y el THC puede cambiar según la legislación vigente.